Expertos comparten ideas para mejorar la conservación de la Patagonia chilena
En un evento apoyado por Pew, los asistentes destacaron la necesidad de protección de tierra y mar, mejora de la gobernanza, y vinculación con las comunidades
Una mejora en la conservación de los vastos territorios, mares y costas de la Patagonia chilena podría reportar múltiples beneficios tanto para la naturaleza como para la gente que vive cerca de o visita las áreas protegidas. Esa fue una de las principales conclusiones de la primera versión del “Encuentro de áreas protegidas y comunidades portal” que logró reunir virtualmente a 588 asistentes y 55 expositores. Las reuniones, que se desarrollaron durante cuatro jueves consecutivos entre el 14 de octubre y el 4 de noviembre, fueron organizadas por la Universidad Austral de Chile y apoyadas por The Pew Charitable Trusts y sirvieron como un foro para dialogar sobre el estado de la conservación, las amenazas a los territorios y maritorios de la Patagonia chilena, y las oportunidades para las comunidades en la preservación de áreas de alto valor natural.
Este encuentro, que se espera replicar de forma presencial el próximo año, sirvió como plataforma para que distintos actores—científicos, autoridades y los propios habitantes de la Patagonia—pudieran compartir sus experiencias. Acá una selección de algunas de las ideas expuestas durante esos días.
Cesar Guala, director, Programa Austral Patagonia, Universidad Austral de Chile
“La conservación es por y para la gente. Creemos que una planificación efectiva debe generar y fortalecer los vínculos con la comunidad que está en torno al área protegida. La protección de los ecosistemas y sus paisajes debe necesariamente incluir las culturas que alberga nuestro país, junto con sus costumbres, cosmovisiones y tradiciones”.
Julia Miranda, ex-presidenta, Comisión Mundial de Áreas Protegidas, Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza
“Es importante reconocer el rol que tienen las áreas protegidas en las tres grandes crisis que vive hoy la humanidad, que son la pérdida de biodiversidad, el cambio climático y la pandemia. Esas crisis tienen entrelazadas sus causas y sus soluciones. Lo que ocurra este año en la COP de biodiversidad y cambio climático, sobre el compromiso de los países para aportar a la conservación del 30% del planeta (mares, tierras y aguas dulces), será supremamente importante para enfrentar estas tres crisis”.
Jim Barborak, co-director, Centro para el Manejo de Áreas Protegidas, Colorado State University
“La conservación es una responsabilidad no solo del gobierno central sino también de los gobiernos regionales y municipales. Es importante para Chile en esta transformació n constitucional aprender de las buenas prácticas de América latina en cuanto nuevas constituciones y sus cláusulas ambientales y de áreas protegidas. Tienen que aprovechar esta oportunidad de crear una constitución buena para los chilenos, buena para el turismo, buena para el medioambiente”.
Andrea Bahamonde, jefa de conservación de la biodiversidad de áreas silvestres, CONAF Aysén
“En la región, tenemos una brecha importante que abordar que es la brecha de género. Tenemos en la región una sola guardaparque contratada permanente. Entonces vemos que falta inversión, porque para contratar más mujeres guardaparques, necesitamos infraestructura—por ejemplo, baños. En la región, tenemos 46 guardaparques contratados y hay 5.5 millones de hectáreas. Eso es uno guardaparque por 120 mil hectáreas. Todo esto nos va prendiendo los semáforos en naranjo. Hay que lograr una mejor administración, efectiva, pero también debe ser equitativa”.
Celestino Ancamil, presidente, Agrupación de Turismo Náutico y Conservación de Cetáceos de Puerto Cisnes
“Nuestras comunidades, especialmente las costeras, nos hemos dado cuenta de que nuestro maritorio ha ido sufriendo cambios. Yo he tenido la oportunidad de ver esos cambios. Antes había otros recursos, otra fauna. Era distinto. Tomamos la iniciativa para hacer un turismo de conservación, entregarle conocimiento y una experiencia para que el turista piense distinto y valore distinto su entorno. Agrupados pudimos postular a fondos para llevar conocimiento a niños, adultos y turistas. Nosotros hacemos este trabajo porque nos gusta, nos apasiona”.
Pamela Mayorga, representante de la ECMPO Islas Desertores y Costa de Chaitén
“Las catástrofes naturales que hemos sufrido (Chaitén) nos ha dado un mayor impulso para querer más y respetar más a la naturaleza. Y también nos ha hecho organizarnos y entender que la naturaleza no es la culpable, muchas veces son las políticas humanas las que crean los conflictos”.
Marcelo Santana, alcalde, Río Ibáñez
“Qué importante es la vinculación de las áreas silvestres protegidas con los gobiernos locales. Eso habla de una transformación en la forma de ver cómo las comunidades se integran a los procesos de conservación y cuidado de su entorno. Queremos generar una alternativa de conservación con las comunidades, que el territorio tenga un uso mixto que resguarde su calidad ambiental pero que no amenace la cultura y las tradiciones locales”.
Gustavo San Martín, subsecretaría pesca
“En el mapa marino se está constituyendo una red con distintas categorías de protección: áreas de manejo que son entregadas a comunidades o a pescadores, áreas de conservación como parques y reservas, áreas de múltiples usos y las que son destinadas a los pueblos originarios y claro, las áreas de conservación privadas. Al final tenemos una red, un mosaico con diferentes usos, pero que constituyen un sistema para la conservación, para la gestión de los recursos. Hay que tratar de trabajar e integrar estas áreas”.
David Tecklin, co-director, Programa Austral Patagonia, Universidad Austral de Chile
“Hay dos brechas en las áreas marinas protegidas: una es la ecorregión chiloense que sigue con menos de 1% de protección; y dos, la brecha de la protección efectiva que afecta a todas las figuras de preservación marina y que se refiere a la falta de planificación, personal, embarcaciones con equipamiento, monitoreo, etc. Es por esto por lo que una de las prioridades para la conservación marina es invertir en la gestión efectiva de la porción marina del SNASPE y buscar formas de coordinación y cogestión con otras entidades públicas y comunidades locales en este esfuerzo”.
Francisco Solís Germani, director, proyecto Patagonia chilena, The Pew Charitable Trusts
“Los objetivos de este primer encuentro de áreas protegidas y comunidades portal, a nuestro juicio, se han cumplido con creces. Se ha logrado visibilizar una parte importante del territorio y maritorio de Chile y sus habitantes, que son espacios transformadores, capaces de cambiar la vida de las personas. Espacios de esperanza, de biofilia, amor a la naturaleza, de desarrollo local, de toma de consciencia, de sanación y por sobre todo fuente de vida. Pero estos encuentros no son solo para hablar de biodiversidad, son también para generar un espacio seguro para que perspectivas diversas puedan manifestarse, vengan desde de la praxis, la ciencia, el conocimiento ancestral, local, de los servicios públicos, la academia o la sociedad civil organizada”.
Patricio Vallespín, gobernador, Región de Los Lagos
“Los límites político-administrativos no son importantes para la tarea que hay que emprender, considerando la conservación como un pilar de desarrollo y para poder trabajar mancomunadamente desde Los Ríos hasta Magallanes. Podemos dar señales al país de cómo todos los actores productivos, las universidades, las ONG, nos ponemos de acuerdo para hacer del desarrollo sustentable algo concreto y con una mirada compartida, donde la conservación sea un pilar del progreso”.